La Inspección Ocular, como técnica de investigación criminalística, consiste en la observación directa y personal de lugares, personas y objetos relacionados con un delito. La finalidad de estas inspecciones oculares es esclarecer las circunstancias, identificar al autor del delito, obtener las pruebas de su perpetración y ponerlas a disposición del Juzgado. Por tanto, la Inspección Ocular va dirigida a recoger y conservar los restos materiales del delito para su utilización en el Juicio Oral. Siendo así, su principal reto es localizar y preservar lo hallado en la escena del delito y su posterior tratamiento por parte de las distintas disciplinas de la Criminalística.
Teniendo en cuenta lo anterior, se puede concluir que la Inspección Ocular, es una de las diligencias más importantes ante un hecho delictivo. Su ejecución debe estar ajustada a la Ley y demás normas que la afectan. Por tanto, este curso proporciona al alumno la terminología básica a utilizar en una Inspección Ocular, conocer las medidas a tomar, identificar el personal interviniente y sus funciones, así como los tipos de escenas, objetos encontrados y el tratamiento que debe tener cada uno.
Este curso está diseñado para adaptarse a cualquier nivel de conocimiento, desde principiantes hasta profesionales experimentados en seguridad, pues le permite a todos sus diplomados acceder a puestos de empleo, tanto del sector privado como del público, además de proporcionarles méritos y reforzar la potencialidad de su currículum en procesos de selección de personal.
Igualmente, les permite obtener créditos Universitarios Europeos (ECTS), por lo que es baremable para los concursos de oposición, las bolsas de contratación, oposiciones, plazas interinas, etc., de todo el país.
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Temario:
Destinatarios: Miembros de la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
